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taste of honey

¿Está mal ser antisocial?

Hablaba hace un rato con Nicolás sobre nuestra ausencia o no de timidez, sobre nuestra evolución en este terreno y claro, no terminamos la conversación y no se, pero hoy me ha entrado una desazón... (porque últimamente no sé qué nos pasa pero no hacemos otra cosa que irnos por las ramas, hilar un tema con otro distinto o simplemente cortar la conversación porque alguien llama, Colate tiene que cambiarse la sonda o cosas por el estilo...)
Resumiendo, es verdad lo que canta Morrissey de que la timidez puede impedirte hacer las cosas que quieres en la vida, pero... ¿no te aisla también de ciertos riesgos? ¿no es cierto que en la distancia hay cierta cura?
Yo soy consciente de que soy extremadamente tímida y no es algo que me guste o no, es algo con lo que nos toca vivir. Supongo que se pueden hacer mil cosas para superarla, para suavizarla y tal, el tema es si merece la pena. El sarcasmo y la ironía están bien, pero no se...
Ufff... creo que me estoy poniendo muy pesada, así que me voy a que la neurona descanse

AY QUE CLASICÓN!!

AY QUE CLASICÓN!!

No os dan temporadas en las que no sois capaces de ir más alla de media docena de discos? Que intentais no ceñiros a eso y no lo conseguis? A mi es que me frustra tannnnto! Con la de dinero que nos gastamos en discos, y luego que te entren estas espirales de hermetismo.
Mi lista de estos días se reduce al Louder than bombs de Smiths, el Southpaw Grammar de Mozzer, Black Celebration de Depeche Mode, el Pure de Lightning Seeds y, algo que no sólo desentona sino que me desencaja a mi misma: The Sturm und Drag Symphonies de Haydn. Si, no me lo explico. Todo viejo, pero disgregado.
El tema es: por qué nos pasan estas cosas? (si es que no me pasa sólo a mi).
Esperemos que con la llegada del nuevo de Coldplay, y la copia que amablemente Dazzito me va a regalar del magnifico disco de New Order todo vuelva a su ser...
muaks!

Bienvenido al weblog Taste of honey

Durante algún tiempo he recibido comentarios para que crease mi propia weblog, me han propuesto dejar de malmeter en otros foros de manera muy sutil. Admitámoslo, eso de que alguien vaya a tu casa, entre en la cocina y se ponga a administrar y tomar posiciones entre tus ollas, sartenes y especias es molestísimo, así que aqui estoy, montando mi propia cocina.
El único objeto de esta maltrecha bitácora es ofrecer un buen menú, variado (dentro de mis posibilidades, claro está. Al fin y al cabo cada uno tenemos nuestro propio mundo, y el mío es cada día más limitado). Tened en cuenta que toda obra produce desperdicios, así que si algún día el menú se compone de frustraciones, mal humor y/o trenes perdidos ya saben lo que toca: aguantar o irse, que aquí no disponemos de hojas de reclamaciones a disposición del cliente.